El maquillaje es un arte regido por normas y reglas, que por años hemos seguido al pie de la letra, pero con el paso del tiempo, hemos notado que algunas de estas normas no son tan esenciales o necesarias como creíamos, y si queremos, tenemos todo el derecho de romperlas. Cada mujer tiene gustos y necesidades diferentes, en cuanto a cosmética, lo recomendable es probar lo que se acomode a cada una de nosotras y después elegir si deseamos seguir con ellas o desecharlas.

1. Labios potentes u ojos potentes, pero las dos cosas no

   

Si deseamos combinar unos ojos ahumados y unos labios rojos intensos, al mismo tiempo, es posible. Debemos de estar conscientes que para llevar dos looks intensos, la paleta cromática que elijamos, tanto para los ojos como para los labios, tiene que tener sentido y definición, los colores deben de armonizar y no chocar entre ellos.

2. Debemos de utilizar base de maquillaje en todo el rostro

   

Esta norma no es 100% real, ya que si gozamos de una piel normal, sin poros abiertos, ni brillo, y con un tono parejo, hasta se podría omitir este paso en la rutina de maquillaje. La base ayuda a cubrir las imperfecciones del rostro, y si no tenemos, es innecesario corregir algo, que desde el principio se encuentra bien. Quizás usando un poco de corrector debajo de los ojos, alrededor de la nariz, y para definir los labios, sea suficiente, y sólo para resaltar nuestras facciones.

3. Siempre se debe sellar la base de maquillaje, con polvos

   

Algunas veces, si tenemos la piel seca y sellamos con polvos, solo dará un efecto de resequedad en el rostro, acentuando las zonas secas. Por eso, muchas fórmulas de bases de maquillaje y correctores, no necesitan ser selladas y brindan un aspecto mate, que al mismo tiempo hidrata la piel y duran todo el día, sin necesidad de retocarlas. Pero las mujeres que tienden a tener la piel grasa, sí se les recomienda sellar la base con polvos translucidos.

4. El contouring es imprescindible

   

Sabemos que esta técnica llegó para quedarse por mucho tiempo, pero no es necesario agregarla a nuestra rutina de todos los días. Si deseamos hacerlo está bien, pero usando iluminador, blush o bronceador, también logramos resaltar nuestras facciones sin perder tanto tiempo, y dejando un look más natural y limpio, para el día a día.

5. El tono de maquillaje que tenemos que comprar, debe de ser exactamente igual al de nuestro rostro

   

Lo que queremos conseguir, al usar una base de maquillaje, es que toda la piel que está visible tenga un tono parejo, esto incluye el rostro y el cuello, algunas veces hasta los hombros, creando y unificando un solo bloque de color del mismo tono. Por ello, debemos buscar una base de maquillaje que haga que nuestro cuello y nuestra cara queden exactamente iguales, sin crear cortes de color. Es difícil encontrar el color adecuado, pero no imposible; combinando dos tonos podemos obtener el que mejor se ajuste a nuestra piel.

@DeDiosasyMas